El día 8 de febrero la parroquia Emperatriz de América se vistió de gala para recibir a su nuevo párroco, el P. Jesús Tlecuile Mixteco a.a. La ceremonia comenzó a las seis de la tarde donde participaron varios sacerdotes del decanato, algunos compañeros que estudian junto con el P. Jesús en la Universidad Pontificia de México, y desde luego, no podían faltar los sacerdotes, religiosos y laicos (asuncionistas) que acompañaron a su hermano en esta nueva misión encomendada.
La ceremonia tuvo un tinte muy solemne, especialmente en los momentos que caracterizan el rito de toma de posesión canónica de una parroquia. Al inicio el decano leyó el nombramiento del P. Jesús, donde se acentuó la exhortación a ser un buen pastor para el pueblo de Dios.
Posteriormente, el P. Jesús hizo profesión de fe ante el pueblo de Dios y así mismo leyó el juramento de fidelidad, fue un momento muy emotivo para la feligresía que no pudo resistir los aplausos después de escuchar las palabras de su nuevo párroco.
El punto más significativo fue la entrega de la parroquia, donde el vicario y el nuevo párroco se dirigieron a los diferentes espacios dentro del templo. Presididos por el turiferario, la cruz alta y los ciriales, en procesión se dirigieron al atrio de la iglesia donde el vicario entregó las llaves de la parroquia al P. Jesús.
Seguido de esto, el nuevo párroco toco enérgicamente la campana como muestra de su misión de reunir y recibir al pueblo de Dios en el templo, ahí mismo, el vicario exhortó al nuevo párroco — "Cristo, que murió en la cruz para reunir a los hijos de Dios disperso por el pecado, te encomienda que seas asiduo en convocar a tus fieles para que, al sonido de estas campanas, se apresuren a congregarse en esta iglesia.
Haz sonar, pues, las campanas parroquiales para señalar los días de fiesta, los tiempos de oración y los principales acontecimientos que afectarán, con alegría o con lágrimas a esta comunidad o a algunos de sus miembros" —.
Continuando con el recorrido por el templo se entregó así mismo el confesionario, el sagrario, el baptisterio y finalmente el altar, donde el P. Jesús se revistió con la casulla y así concluyó con este rito particular de toma de posesión de los diversos lugares celebrativos.
Después prosiguieron con la liturgia de la eucaristía.
Al finalizar el rito de comunión, el P. Flavio Bustos Castillo, Superior regional de México y parroco saliente dirigió unas palabras de agradecimiento a la feligresía y le dio la bienvenida al nuevo párroco, a lo cual los presentes respondieron con un fuerte y extendido aplauso a este gesto muy emotivo como forma de agradecimiento por el servicio de nuestro hermano Flavio.
Finalmente, como en cada fiesta, no podía faltar la convivencia y el compartir de los alimentos y un rato agradable como familia cristiana. Se hizo invitación a todos los presentes a pasar a la recepción en el salón parroquial. Ahí compartimos y reímos juntos por un rato para festejar a nuestro nuevo Párroco.
Hno Rafael Huerta Ramos, a.a.
Comments